Es bastante probable que si has mirado el horario de las clases dirigidas de tu gimansio de confianza, haya una de ellas llamada “entrenamiento funcional”. También es bastante probable que no tengas demasiado claro en qué consiste este tipo de entrenamiento, acostumbrado a nombres marketinianos como “GAP” (no va sobre la marca de ropa, sino que es el acrónimo de Glúteos, Abdomen y Piernas), “Body Pump”, “Step” o “Cross Training”. Sin embargo, el entrenamiento funcional responde a una metodología legítima de entrenamiento y tiene un sentido. En este artículo te explicaremos en qué consiste y por qué es interesante para ti probar esta actividad.
La palabra funcional, como es evidente, viene de “función”, lo que quiere decir que tiene una finalidad. El entrenamiento funcional se compone de ejercicios que tienen el objetivo de que mejore tu capacidad física en actividades de la vida real. Podemos estar hablando de la capacidad de levantarte de la cama o de una silla o de mejorar en tu deporte favorito, se han estudiado los patrones de movimiento más habituales que realizamos y se han creado rutinas de entrenamiento funcional para ser más fuerte en los mismos. Ejemplos de ejercicios muy funcionales son las sentadillas, el peso muerto o las flexiones.
Por tanto, si tuviéramos que definir en una frase qué es entrenamiento funcional diríamos que es entrenar nuestro cuerpo para ser mejor en los movimientos que usamos en nuestra vida diaria.
Ejercicios del entrenamiento físico funcional
Una rutina de entrenamiento funcional suele estar compuesta de ejercicios compuestos como presses, flexiones o zancadas. Esto es así porque imita mejor nuestros movimientos del día a día que ejercicios de aislamiento como un curl de bíceps o una extensiòn de cuádriceps. No queremos decir que estos ejercicios sean inútiles, pero tienen una transferencia mucho menor a nuestros movimientos del día a día. ¿Acaso te has visto alguna vez en la situación de tener que sostener algo sólo con la fuerza de tus bíceps? Seguro que no. Sin embargo te habrá pasado muchas veces que tengas que tengas que hacer una zancada para atarte los zapatos, o que imites un peso muerto para coger algo del suelo o empujar cualquier cosa.
Sin embargo, se puede dar el caso de que un atleta tenga un músculo claramente infradesarrollado, y en ese caso es interesante probar ejercicios aislados para que ese músculo se ponga a la altura de los demás. Es un caso habitual de personas con lesiones o problemas de movilidad.
El entrenamiento funcional no es crossfit
Mucha gente confunde el Crossfit y el entrenamiento funcional, y es bastante razonable. El Crossfit se compone principalmente de ejercicios funcionales, pero el objetivo del entrenamiento de Crossfit va más allá de ser funcional en la vida diaria y busca mejorar tu rendimiento en las 9 capacidades físicas: resistencia cardiovascular, resistencia metabólica, fuerza, flexibilidad, potencia, velocidad, coordinación, agilidad, equilibrio y precisión.
Esto quiere decir que tratará de que entrenes en fatiga, con intensidad muy alta y haciendo movimientos complejos. El problema es que este tipo de entrenamientos si no están muy bien medidos, pueden acabar en lesiones. ¿Quieres saber como evitar lesiones en Crossfit? Visita nuestro artículo.
El concepto que debemos sacar de este párrafo es que aunque la mayoría de ejercicios del Crossfit se puedan calificar como funcionales, el ser funcional no es el objetivo último del crossfit (aunque sí una consecuencia del mismo).
beneficios del entrenamiento funcional
- Usa tu cuerpo de manera eficiente: al entrenar centrado en ejercicios compuestos, como un snatch o una dominada, trabajamos uniendo todas las partes de nuestro cuerpo de manera eficiente. Por ejemplo, al hacer una plancha, trabajamos no sólo el abdomen, sino también brazos, hombro y glúteos. De esta manera tu estado físico general mejora en menos tiempo e incrementa la capacidad de tu cuerpo para entrenar eficientemente.
- Desarrolla coordinación, agilidad y equilibrio: otro de los beneficios de los ejercicios funcionales es que al no haber máquinas que sostienen tu cuerpo, tienes que fiarte de tu equilibrio para coordinar tu cuerpo a lo largo del movimiento. Tanto un joven que quiera mejorar para su deporte como una persona más mayor que busque mejorar su calidad de vida, estas habilidades físicas son clave para ser independiente y tener mejor calidad.
- Previene lesiones: sí, como lo oyes. Aunque te puedes lesionar haciendo deporte, realmente acaba siendo más lesivo el sedentarismo que entrenar. Entrenar con cargas hará que tus articulaciones tengan menor riesgo de lesión en tus actividades del día a día ya que se fortalecerán y estarán más sanas. Además tendrás mejor higiene postural y en general tendrás un cuerpo mejor preparado para sufrir estrés o impactos tanto en otros deportes como en el día a día.
- Fortalecerás tu abdomen: el abdomen es el grupo muscular clave para mantener la estabilidad de nuestro cuerpo y una buena estabilidad. Es por ello que la mayoría de ejercicios funcionales trabajan el core, que tiene la función de proteger tus órganos y además reduce el dolor en la espalda.
- Mejorarás tu flexibilidad y mobilidad: entre muchos otros, algunos patrones que se ejecutan en el entrenamiento funcional incluyen soltar o flexionar cadera, pecho o espalda, de esta manera tu musculatura generará y soltará tensión contrayéndose y relajándose.
- Incrementarás tu fuerza y velocidad: ejercicios como las sentadillas con salto, flexiones o burpees fomentan el uso de tu cuerpo como un todo en el que una combinación de fuerza y velocidad es necesaria para progresar en los mismos. Según te centras en estos elementos, desarrollarás un gran control y explosividad en tus movimientos, y podrás cambiar de dirección y velocidad de manera más fluida.
qué hacer y qué no en entrenamiento funcional
Sí entrena todo su cuerpo en una sesión: no tienes que dividir siempre tu entrenamiento en diferentes grupos musculares. Ejercicios como sentadillas, prensas, peso muerto, balones medicinales, etc… entrenan todo el cuerpo de una sola vez y tienen una amplia gama de beneficios. El cuerpo está diseñado para funcionar como un sistema, por lo que para funcionar mejor debe ser entrenado como un sistema, no como una colección de partes individuales.
Sí usa pesas libres. En el caso del entrenamiento funcional, el uso de pesas o bandas puede resultar más efectivo ya que obliga a su cuerpo a sostenerse, lo que es mucho más funcional.
No copies, busca consejo. Existen muchos ejercicios y equipos que se autodenominan entrenamiento físico funcional. Casi todo el equipo necesario para hacer gimnasia funcional está en los gimnasios, pero a menudo, el equipo se usa sin saber como entrenar correctamente o por personas que no están físicamente preparadas para ese equipo específico. Es común que ver personas que no saben lo que hacen y simplemente copian lo que ven a otros haciendo en el gimnasio. De hecho, existe la posibilidad de que la persona a la que estaba mirando no estaba trabajando bien, e incluso si lo fuera, podría no ser el ejercicio adecuado para ti. Busca el consejo de un entrenador físico sobre cómo usar el equipo y cuál es su nivel físico para saber qué movimientos puede realizar de manera segura y cuales no.
es interesante probar ejercicios aislados para que ese músculo se ponga a la altura de los demás